¿Te has descuidado un poquito y a falta de unas semanas para esta fiesta tan especial no te abrocha tu pantalón favorito? Como en el anuncio de la tele, ¿a ese vestido que te has probado parece que le ha salido tripa? ¡Adiós disgusto y bienvenidas fiestas! Ni barriga, ni michelines, esta Navidad darás la talla gracias a una dieta adecuada, ejercicio que fortalece la región abdominal y unos complementos nutritivos devora grasas que te ayudarán a lucir tipo. ¿Te atreves? Empezamos.
Vientre plano en 14 días con la cura de piña
Aunque se desconoce el nombre del endocrino que comenzó a recomendarla, la cura de piña empezó causando furor en Estados Unidos y su fama saltó pronto a este lado del Atlántico, donde acaparó páginas y páginas de revistas femeninas, más desde que Isabel Preyler la declaró su secreto de belleza.
Por supuesto, nos referimos a piña al natural –no vale en almíbar–: 85% de agua, mucha fibra y una buena dosis de hidratos de carbono, ideales para controlar el apetito y perder peso rápidamente. Esta fruta es, además, muy rica en vitaminas y minerales y contiene 18 aminoácidos distintos, entre ellos los ocho esenciales para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Pero lo mejor de todo y el motivo de que la cura de piña sea la dieta favorita de las famosas que ya han sobrepasado los cuarenta, es que esta fruta contiene proteasas, unas enzimas activas que actúan sobre el colágeno, retrasando su caída de niveles, manteniendo la tersura de la piel y paliando los signos de envejecimiento.
Cómo se hace la cura de piña
1 ó 2 días a la semana, dependiendo del volumen que queramos perder, sólo se puede comer piña natural. Al contener muy pocas calorías, la piña ayudará a nuestro cuerpo a liberarse de sus reservas de agua y a eliminar las grasas concentradas en los depósitos adiposos de tripa y abdomen.
Si nos apuntamos a la cura de piña 1 día por semana, elegiremos aquel en el que nos resulte más fácil suprimir cualquier otro tipo de alimento de la dieta y tomar únicamente piña. Si optamos por los 2 días por semana y el segundo se nos hace demasiado aburrido y monótono o aparece la sensación de hambre, además de la piña podemos tomar, en comida y cena, pavo, pollo o pescado blanco asado con una pequeña guarnición de arroz blanco o ensalada.
Aunque los resultados sean espectaculares desde el primer día, la cura de piña no debe prolongarse nunca más de dos días por semana. Aunque esta fruta sea muy rica en vitaminas y minerales, apenas contiene elementos energéticos. Su carencia puede dar lugar a agotamiento, apatía, debilidad muscular y mal humor.
Añade a tu rutina deportiva una caminata de 3 kilómetros
Para rebajar tripa o eliminar los antiestéticos michelines sin dejar paso a la flaccidez, es necesario complementar la dieta con ejercicios físicos que combatan la grasa localizada en esa zona. Y aunque tradicionalmente, al relacionar tripa y deporte, nos vengan a la mente durísimas tablas de abdominales, en esta ocasión, olvídate. Esta Navidad vamos a colocar un pie detrás del otro y empezar a caminar.
Caminar nos ayudará a quemar grasas localizadas, liberar endorfinas –las hormonas de la felicidad– y reducir el apetito. No confundir con pasear, se trata de caminar a paso rápido, cubriendo una distancia de 3 kilómetros en 30 minutos. Este es el objetivo final, por lo que pasito a pasito, día a día, acelerando el paso, iremos rebajando nuestra propia marca.
Tres consejos: caminar sin objetos en las manos, para que los brazos se balanceen adelante y atrás al ritmo de nuestras piernas; andar metiendo tripa, de forma natural, sin que nos dificulte la respiración –¡meter tripa mientras se camina es la forma más rápida y sencilla de reducir abdomen!–; y por último, caminar bien calzados, con deportivas de suela ultraflexible, soporte arqueado y buen amortiguamiento en el talón.
Suplementos de cafeína
Por último y ya a nivel de suplementación deportiva, existen multitud de productos que nos ayudan a controlar y bajar peso, al tiempo que tonificamos y modelamos. L-carnitina y cafeína son los más importantes, pero como lo que buscamos es activar el metabolismo, devorar grasas y bajar tripa de forma rápida, esta Navidad nos decantaremos por la cafeína.
La cafeína tiene un efecto desintoxicante y depurador, refuerza las defensas naturales, estimula la secreción de las glándulas digestivas y facilita la digestión de los alimentos grasos, de ahí que se la conozca como el “eliminador natural de grasas”. Al ser estimulante, nos mantiene despiertos y mejora nuestro humor, la cafeína es un auténtico “chute” de energía. Pero también tiene efectos secundarios: aumenta la presión arterial, puede sobrecargar el hígado e interferir en la absorción del calcio, por lo que no se recomienda en caso de hipertensión, estado carencial o problemas hepáticos. En estos casos, siempre bajo estricto control médico.
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